Ya me tenía preocupada...Juan casi 8 años, una boca con dos filas de dientes abajo (los de leche y los nuevos detrás) y que no se le caía ninguno.
Pero ayer ya se cayó el primero. Bueno, Adela "la Arrancadientes" tuvo algo que ver...
En esta casa el ratón Pérez solo ha traído moneditas a sus hermanas. Aunque Juan dice que a otros niños les traen juguetitos... A mi eso no me cuadra. Los juguetes abultan mucho debajo de la almohada. En cambio con las monedas...¡te puedes comprar el juguetito que tú quieras!.
Aún así el ratoncito nos dejó algo más a parte de las moneditas: Una bolsita de plástico para que guarde el siguiente diente que se le caiga la próxima vez, y un diente dorado ("de oro", como dice Juan) réplica del que se le ha caído ("mamá, ¿este diente de oro será de persona o de animal?"- se preguntaba Juan-. "No hijo, debe de ser una reproducción").
Nota: Para hacer la bolsita de plástico para depositar el próximo diente que se le caiga, el ratoncito debió de usar plástico de ese de forrar libros y para pegar los bordes aplicándole calor con una plancha o con un pirograbador a través de papel de aluminio. Y para hacer el diente de oro, seguro que usó pasta Fimo color oro.
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