MADRE IMAGINACION: TARTA FONDANT: WINDSURF

Este verano la "familia pandereta" hicimos un curso de Windsurf. Todos excepto el pequeño.

Asi que en septiembre, cuando llegaron los cumpleaños de padre e hija mediana, ya tenia motivo para hacer la tarta. Y ademas decidí "optimizar recursos" y hacer dos en una (dos celebraciones en una sola tarta).

No voy a contar detalles de cómo la hice (al final algún dia pondré la receta del bizcocho de yogur, del almíbar para empaparla y de cómo montar la nata-trufa). Pero esta vez me centraré sobre todo en las catastrofes.

Como no tengo ni idea del fondant y voy improvisando aunque haga alguna consulta por internet (deberia de hacer algún curso con profesoras especializadas), algunas cosas acaban en tragedia.

Bueno, todas no. Que lo que se me ocurrio para la vela de la tabla quedó bastante apañado (para poder dejar la típica ventanita transparente de la vela se me ocurrió pegar el fondant a un plástico transparente -de esos de forrar libros- y aguantó!!, y para el mástil y la botavara con pajitas negras -en la del mastil introduje un palo de pinchos morunos)

Pero los "windsurfistas" tenían que tener una cierta postura flexionada que le diese veracidad al asunto....y ahi vinieron mis males.....

Empecé por hacer las partes de los muñecos por separado (cabeza, nariz, tronco, brazos y piernas) que dejaría secar un día (el fondant recién modelado es demasiado blando) y que procedería a unir con trocitos de palillos y humedeciendo parte del fondant para que el propio azúcar hiciera de pegamento.

El reultado fue que, al maniobrar con tanto palillo, los orificios fueron cogiendo olgura. Para ello rellené con un poquitin de fondant humedecido...aquello no se secaba y no se pegaba ni de broma.

Este da una grima especial

Tanto "empalado" daba como grima...

Para colmo me pasó lo de siempre. Una tarea que comencé un lunes por la tarde (para ir con tiempo), al final la acabe el sabado despues de la comida de la celebración, con la gente esperando a los postres. Con la nata que habia conseguido montar justo antes de comer y que aún tenía que colorear....

Osea que mientras que mi marido me llamaba a voces..."¡pero vienes ya o qué!!?", Yo estaba intentando que los muñequitos se mantuvieran medio de pié, tiñendo chapuceramente la nata y cubriendo la tarta de forma que me quedaron unas cuantas "calvas" en los laterales, dejando ver la plataforma de poliespan que habia tenido que utilizar para pinchar las velas y que aquello tuviera una mínima consistencia...jajajajajajaj

Y encima con tanto jaleo y que yo ya tenia la camara rota, apenas hay fotos (fotos decentes, quiero decir...).

Aqui se aprecia al muñeco de mi marido, totalmente "escoyuntao" jajajaja

(El mas perjudicado fue mi marido: se le cayo una pierna y la cabeza quedó apoyada sobre un hombro -sin llegar a caerse, menos mal- lo que le confería un asecto de estar durmiendo, mas que de estar surfeando...jajajajaja)